Habran paso a la vampiresa del indie, la medusa del rock alternativo y la oveja negra del soul pervertida por el post punk; esa sería mejor descripción que podríamos dar al peligroso y vertiginoso dueto de indie rock The Noisettes. Impredecibles como un tren descarrillado el grupo londinense firmó uno de los debuts más poderosos y ruidosos de la escena. What’s the time Mr. Wolf? es firme pero explosivo, fino pero venenoso; un disco elegantemente eufórico y cargado de adrenalina.

Como los hijos perdidos de Nina Simone y los Yeah, yeah, yeah’s, The Noisettes no escatiman en detalles al presentar cortes cargados y caóticos pero siempre inteligibles. La bella y exuberante voz de la vocalista Shingai Shoniwa, más los arreglos y composición de Dan Smith y Jamie Morrison comprobaron una mezcla cual chispa y pólvora. De vez en cuando nos topamos algo más suave y fino como

The Count of Monte Christo o Hierarchy que nos recuerda de las influencias tempranas de la cantante, una directa descendiente de Ella Fitzgerald y Billie Holiday. Pero Shingai tan Ella y Billie como lo es ella, también comparte cuerpo con otros demonios muy a lo Iggy Pop o Janis Joplin. No te acomodes, pues cada canción te toma de la nuca y sacude cada hueso y fibra en tu cuerpo. A pesar de una fórmula esencialmente sencilla como la del punk, es complementada con lo crudo del garaje rock y la riqueza en detalles del blues. Shingai y compañía son tan elegantes y cabareteros como los cantantes de salón de los años 50, pero tan rebelde y anarquista como el punk de los años 70.

Un buen ejemplo de esa bipolaridad es Sister Rosetta (capture de spirit) con versos sensuales y coros explosivos. Misteriosa y endemoniada, elegante y malintencionada Shingai y The Noisettes son unos de los actos más frescos de la escena indie actual, presentando un abanico de matices a través de dos géneros tan distintos entre sí que, finalmente emparejados dieron vida a este fantástico grupo. Esta alquimia que pudo haber sido una blasfemia, resulta más bien en una química inigualable. A veces bella y delicada, otras más tenaz y agresiva What’s the time Mr. Wolf? es el disco perfecto para empezar a explorar este fantástico góspel punk.